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Luego de que hace un par de semanas se inauguraran los XXIV Juegos Olímpicos de Invierno celebrados en China, llegan a su fin este domingo 20 de febrero, dejando atrás la participación de cerca de 3 mil atletas de 91 países, que compitieron por obtener la mayor cosecha de las aproximadamente 327 medallas en juego en las 109 diferentes pruebas que se disputaron dentro de las 15 disciplinas deportivas consideradas para Beijing 2022.
Tras 18 días de competencia y a falta de que se celebraran las finales de curling, esquí de fondo, hockey sobre hielo y bobsleigh por equipos, Noruega marcha a la cabeza del medallero con 35 preseas (15 oros, 8 platas y 12 bronces), seguida por Alemania con 24 (11 oros, 8 platas y 5 bronces), el anfitrión: China con 15 (9 oros, 4 platas y 2 bronces), y Estados Unidos con 24 (8 oros, 9 platas y 7 bronces), no obstante que el Comité Olímpico Ruso con 31 medallas y Canadá con 25 tuvieran más metales, pero menos conquistas de primeros lugares.
Desafortunadamente, de las 8 delegaciones latinoamericanas que compitieron ninguna obtuvo una presea; sin embargo, un país hispanoparlante sí lo hizo, con la plata en el snowboard halfpipe femenil conseguida por Queralt Castellet para España. Pero más allá de los números, las emociones vividas en las diferentes instalaciones olímpicas han dejado sorprendidos a los espectadores de la justa invernal.
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El Centro Nacional de Deslizamiento dejó boquiabiertos a quienes presenciaron las competencias de skeleton, luge y bobsleigh, donde Alemania prácticamente arrasó con todos los oros en disputa; pero quien se robó los reflectores fue la brasileña Nicole Rocha Silveira, quien con una gran actuación obtuvo el décimo tercer lugar en la final femenil de skeleton, uno de los mejores resultados para un país latinoamericano.
Pero el auténtico fenómeno mediático fue la presencia del patinador mexicano de 22 años: Donovan Carrillo, quien se convirtió en el centro de atención de los medios de comunicación y las redes sociales tras derrochar su talento y carisma en la pista de hielo y alcanzar el 22º lugar en la final individual varonil al tener su mejor puntaje en una competencia internacional. Hacía 30 años que México no competía en esta disciplina, luego de que lo hicieran Ricardo Olavarrieta y Mayda Navarro en Albertville 1992.
Respecto a la participación de los demás atletas de la delegación mexicana, el esquiador de fondo Jonathan Soto quedó en el puesto 94 en la prueba de 15 kilómetros de cross country; Rodolfo Dickson mejoró su participación de hace 4 años al quedar en el lugar 35 del slalom gigante: mientras que Sarah Schleper quedó en el lugar 37 del slalom gigante y 37 del súper gigante.
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Tras estas emociones, e incluso decepciones, como en el caso de la patinadora artística rusa Kamila Valieva, que no pudo quedarse con su medalla a pesar de convertirse en la primera mujer en ejecutar un salto cuádruple en Juegos Olímpicos tras darse a conocer que hace algunos meses había dado positivo en un control antidopaje, por lo que a pesar de que a sus escasos 15 años había sido la ganadora absoluta de la prueba, la situación será definida por el TAS.
Este domingo el Estadio de Beijing es ya la única sede en albergar una clausura de juegos olímpicos tanto de verano (Beijing 2008) como de invierno, y deja por delante una espera de 4 años hasta la próxima edición a celebrarse en Italia en Milán – Cortina d’Ampezzo 2026.
Y ustedes queridos lectores, ‘Epopeyas… de hidalgos, heroínas y otras gestas deportivas’, ¿estuvieron al pendiente de los Juegos Olímpicos de Invierno de Beijing 2022?
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