Presuntos integrantes de la delincuencia organizada abandonaron la madrugada de este jueves, los cadáveres de seis hombres que presentaban huellas de tortura, en el interior de un vehículo que fue llevado hasta la plancha de la plaza de armas de la ciudad de Zacatecas, justo frente al Palacio de Gobierno del estado.
De acuerdo con el informe preliminar de las autoridades, alrededor de las 5:20 horas, un sujeto no identificado, ingresó al centro histórico de la capital de Zacatecas por la avenida Mina Quebradilla —al poniente de la capital—, conduciendo una camioneta Mazda CX3, cerrada, color gris-plata, y brincando una pequeña balaustrada y algunos escalones, se estacionó justo a un costado del árbol de navidad instalado temporalmente en el sitio.
Acto seguido, el sujeto descendió del vehículo y huyó corriendo del lugar, por el callejón de Las Campanas, que separa el edificio del Palacio de Gobierno de la catedral basílica de Zacatecas. Los primeros en llegar al sitio, fueron integrantes de la Policía Municipal de Proximidad, quienes revisaron el interior de la camioneta y acordonaron el sitio, mientras decenas de patrullas de otras corporaciones: Policía Ministerial, Policía Estatal Preventiva y Guardia Nacional, llegaron al lugar.
Todas las calles de acceso a la plaza de armas fueron acordonadas, para impedir el paso a transeúntes y vehículos. En pocos minutos, los peritos de la fiscalía zacatecana pidieron una grúa a la Policía de Vialidad y Tránsito, y trasladaron la camioneta Mazda CX3 con todo y los seis cuerpos en su interior, para no procesarlos pericialmente en el lugar. El traslado lo realizaron en medio de un fuerte operativo de custodia, con policías estatales y ministeriales.
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Apenas cinco horas antes, ya en los primeros minutos de este jueves, en otro lugar, sujetos armados a bordo de varios vehículos dejaron abandonados frente a la caseta de cobro de peaje de Vetagrande —10 kilómetros al norte de la capital zacatecana—, los cadáveres maniatados de otras dos personas, no identificadas.
Presumiblemente, tales acciones son una reacción de un grupo criminal, por la detención de un líder apodado “El 27”, y uno de sus lugartenientes, que realizaron policías de investigación, la noche previa, el miércoles cinco de enero, en una localidad del Cañón de Tlaltenango, al suroeste de la capital.
De hecho, alrededor de las 22:00 horas del miércoles, un grupo de sicarios intentó emboscar a integrantes de la Policía de Investigación y de la Fiscalía General de Justicia de Zacatecas, cuando los agentes transitaban con destino a la capital del estado, en varios vehículos, en el tramo que comprende la salida de Tepetongo, rumbo a Jerez. Trascendió que el tiroteo se extendió varios minutos, hasta que integrantes de la Guardia Nacional llegaron al sitio a apoyar a los policías de investigación, y salieron de ese sitio. Oficialmente no se informó de muertos o heridos.
Mientras tanto, tras el abandono de los seis cadáveres frente a Palacio de Gobierno, una hora y media más tarde —a las 7:00 horas—, el gobernador David Monreal Ávila acudió hasta la plaza de armas y desde ahí, a un costado del sitio donde fue abandonada la camioneta, transmitió un video en vivo, por Facebook, para dar su versión de lo acontecido:
“Hoy por la mañana, estaba revisando mis actividades del día, cuando a las cinco y media, me informan de una camioneta gris Mazda, que vinieron a dejar aquí frente al Palacio de Gobierno, con cuerpos de… aparentemente golpeados, lesionados (con signos de tortura), que vinieron a dejarlos aquí”.
Esto, explicó el gobernador de Zacatecas, son parte “del reto principal, que es la inseguridad, un reto pendiente en la patria y en nuestro estado”.
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Monreal Ávila aseguró que apenas el pasado 25 de noviembre del 2021, el presidente Andrés Manuel López Obrador visitó la entidad, para poner en marcha el Plan Zacatecas II —de combate a la violencia e inseguridad—, con el cual dijo el mandatario zacatecano “Bendito Dios, el programa ha estado dando resultados, tuvimos un buen cierre de año, en diciembre disminuyeron todos los índices del comportamiento del delito, y eso me da mucho gusto, porque poco a poco vamos a ir recuperando la paz”.
Sin embargo, recordó el mandatario a toda la ciudadanía en la transmisión que hizo por Facebook, su premisa de que, “el tema de la inseguridad es el tema de temas, y sigo sosteniendo: la inseguridad dejó de ser un asunto de Estado, para ser un asunto de todos… ésta es una herencia maldita”.
Finalmente, entre otras cosas, David Monreal Ávila admitió que desde el Centro de Comando, Control y Video Vigilancia “C-5”, a cargo de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado de Zacatecas, se detectó puntualmente el ingreso del vehículo que fue conducido hasta el corazón político de la capital zacatecana, sin que ninguna corporación detuviera al responsable del hecho.
“Después de que me informaron, a las 5:30, me di a la tarea de reunir a los mandos policiacos, para que se atendiera… ese vehículo según el C-5, ingresó por Quebradilla a las 5:14, y a las cinco veintitantos estaban entrando aquí frente a Palacio, dejando estos cuerpos sin vida”.
La Jornada
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