Dicen los estudios acerca de la neuroquímica del amor que estamos preparados para enamorarnos profundamente unas 7 veces en la vida, si esto es cierto, ¿cuántos amores te faltaría vivir?
¿Será que algunos ya se excedieron y se llevaron los amores que otros no encuentran? ¿Quién se siente suficientemente bien con un solo amor en su vida o ha tenido relaciones tan largas que no exceden de dos o tres grandes amores? En realidad, el amor es una elección, incluso para enamorarse se requiere tomar la decisión de hacerlo, porque necesitamos derribar nuestras barreras emocionales para abrirle la puerta a la posibilidad de enamorarnos.
Si, fisiológicamente estamos predispuestos para enamorarnos siete veces, si usted ha tenido veinte relaciones es probable que “enamorado, enamorado” solo haya estado siete veces, aunque no se lo diga a nadie para no herir susceptibilidades, no sería agradable estar entre las relaciones que no fueron un enamoramiento profundo.
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¿Y del amor? Tampoco es determinante, NO es cierto que se ama solo una vez y solo a una persona, incluso, es posible amar a dos personas a las vez, aunque el cerebro jerarquiza y se quiere más a una persona. ¡Así de triste es! No solo cuando no se está en la prioridad sino todavía más cuando ya no son solo dos… (si el acuerdo previo no fue de una relación abierta).
Es que en esto del amor aplica tal cual el refrán de que “Cada quien habla cómo le va en la feria”, para unos el amor ha sido un paraíso y otros optan por concluir que este no existe.
Pero, si estás en la lista de quienes aún están abiertos a lo que venga en tu vida amorosa, ¿cómo saber cuántos y tal vez quiénes han sido esos amores que aún dejando de querer uno admite haber querido?
¿Cuántas veces te has enamorado? Y de ahí ¿Cómo es que vives el amor romántico?
Pasar de relación en relación, no es lo más recomendable, no se cierran círculos, no se elaboran duelos, se desensibiliza.
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“Enamorarse” de la noche a la mañana es señal de cuánta soledad o necesidad de amor había antes, desenamorarse con la misma facilidad igualmente es señal de la poca vinculación que había en la relación.
Si bien, es posible que te desenamores instantáneamente luego de tremenda decepción, aún si había un sentimiento fuerte y permanente, pero el amor si termina, muere… Como todo lo que se descuida o se traiciona y deberíamos tenerlo en cuenta.
¿Para qué nos sirve el amor? Idealmente para ser lo mejor de uno mismo, el amor es una energía que logra fortalecer nuestro sistema inmunológico, los neurotransmisores que se producen cuando nos enamoramos nos hacen sentir más vivos que nunca, pero, ni el cuerpo resiste esta locura por muchos años, por eso, antes de 4 años o al cumplir este ciclo de relación (los que eligen durar este tiempo), es posible elegir pasar del enamoramiento al amor o bien, decir adiós.
¿Alguna vez has reflexionado cómo has llevado tu vida amorosa? Si tienes dudas sobre cómo ha sido, preguntarte: si pudieras darle el nombre de una película a tu vida amorosa, ¿cuál sería? Porque esto te revelará mucho más de lo que imaginas.
Si el tema es que la has pasado mal, que te duele el amor, la buena noticia es que el amor no duele, hace daño el desamor, las elecciones inadecuadas, conformarse con menos amor del que quieres y mereces, insistir en donde no te corresponden, permitir abusos, tratarte así a ti mismo es lo que lastima, el amor no. Otra excelente noticia es que el que se va no se lleva el amor, el amor está en ti, y si duele, ¡un montón! Pero pasa, siempre pasa, no vas a sufrir permanentemente , no si no te lo permites.
¡Son excelentes noticias! ¿Verdad?
Tan vanagloriado, tan castigado… el amor es lo que es en tu vida por las elecciones qué haces en torno a este, gracias al universo ahora (¡por fin!) estamos desmitificando al amor romántico y ampliando la visión para entender que cada quien es libre de amar a quien quiera, cómo quiera y que lo deseable es hacerlo siempre y cuando el otro quiera… Porque sin reciprocidad no puede ser sano y tampoco tan gozoso como cuando el amor, la pasión, el gusto y todo lo que se imaginen ocurre de ida y vuelta.
¿Cuántos enamoramientos te falta por vivir? ¿Qué tan preparado estás para amar? ¿Te enamorarías oooootra vez? ¿Qué es lo que ya no volverías a repetir en tu vida amorosa?
Si enamorarse, experimentar amor y ser amado no tuviera la importancia que tiene en nuestra vida no sería el tema constante de canciones, historias, guerras, consultas en psicoterapia… así mismo, el amor es inspiración, compromiso con la vida y también es motivo de dicha y paz, si no es así, habría que cuestionar la idea que se tiene respecto a este.
Queda claro que nuestras elecciones tienen que ver con nuestra historia de vida, y también que esta no es determinante si aprendemos a entender el amor o a resignificarlo.
¡Amoroso fin de semana!
Lorena Patchen
Psicoterapia presencial y en línea.
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